Noche de dulce veneno.

12 de septiembre de 2010, Caracas nos regala una noche mágica. La luna está brillando para  todos los que nos hemos dado cita en el anfiteatro del Sambil para ver a Los Caramelos de Cianuro. La buena energía se siente en el ambiente, flashes de cámara se reflejan en la noche cada 30 segundos, la gente se manifiesta a través de tweets que son reproducidos en una enorme pantalla que ha sido habilitada para ello. Las luces del escenario están apagadas, toda la tarima está a oscuras.

Son las 7:30pm, se empieza a escuchar el bajo inicial de "Dos caras, dos corazones", el público grita eufórico y emocionado por el buen sonido de los instrumentos, impecable. Se prenden las luces, está Pavel Tello al mando del bajo, vistiendo una sudadera negra y un pantalón del mismo color, como con una especie de falda dorada que le llegaba hata los talones, se veía muy rock. El enano sale con su guitarra y sigue el ritmo de la canción; Darío Adames en la batería esperando su turno para empezar a tocar y de pronto sale Asier Cazalis con un jean blanco y una camisa morada cantando. Ahora sí, el Sambil se vino abajo. Y los brasieres también, varios fueron lanzados a Asier cuando coreó "Asier, Asier atrapa mi brasier", creo que esté dude va a tener bastante regalos para darle a sus familiares mujeres en navidad.

Todos los asistentes cantan a la par con Asier, la olla está On Fire, VIP no se queda atrás; los chicos de las secciones A y B con ganas desesperadas de meterse en la olla para ver a los Caramelos más de cerca. Al terminar la primera canción, el vocalista de la banda saluda a su público y presenta a los integrantes, da unas palabras de agradecimiento para las empresas que patrocinan su concierto. Al fondo hay una pantalla gigante que transmite como una especie de VideoArt al ritmo de cada canción, la mayoría con una silueta de mujer bailando. 

Asier habla un poco sobre el nuevo disco de Caramelos de Cianuro, ya son 20 años haciendo música y que mejor manera de celebrarlo que con un nuevo disco. 

Empiezan a tocar su próxima canción, está vez "Las estrellas", luego de esta siguieron paseándose por sus éxitos más conocidos "Sanitarios", "Baby Cohete", "Flor de fuego" y "Retrovisor". Luego de esta secuencia empiezan a tocar "Rubia sol, morena luna", el público canta a todo gañote. Los temas que le siguieron fueron los del nuevo disco. Antes de empezar cada  canción hacía un resumen de ella y la explicaban un poco. Luego de 1 hora de concierto, la banda se va a sus comienzos  y canta "El martillo", estamos seguras de que la gente recordó alguna fiesta de su juventud, luego cantamos "Asunto sexual", "El flaco", "Una foto de tu ombligo" y "Surfer Girl". Con Surfer Girl despidieron el concierto pero el público quería más, así que los gritos pidiendo Otra, otra no se hicieron esperar; así que salieron nuevamente y preguntaron que canción querían escuchar, una chica de la olla les pidió "Verónica", así que Verónica salió al ruedo, se despidieron nuevamente pero la gente seguía pidiendo más, así que decidieron cerrar con la única canción del nuevo disco que no habían tocado, "Lobby".

La emoción que se vivió en el concierto fue sensacional, sólo los verdaderos y fieles fans de Caramelos saben de que les estoy hablando, era increíble el hecho de que con tan sólo dos semanas del lanzamiento del disco ya nos sabíamos todas las canciones, la banda llenó nuestras expectativas y nosotros llenamos la de ellos. 

Debemos agradecer a los grandiosos Caramelos de Cianuro 20 años de buena música en el país. 

Rock On.

Disculpen lo malo de las fotos, pero es que olvidamos la cámara. 

Al Margen.